Un estudio reciente de Gartner Group reportó que el 40 % de las empresas que han perdido sus datos en un desastre informático quiebra en un periodo de 5 años. Esto se debe a que la empresa debe tener la capacidad de replicar sus sistemas, ya que estos últimos son esenciales para la cuenta de resultados. En este sentido, es indispensable disponer de un plan de recuperación para garantizar la continuidad.
Sin embargo, un plan de estas características presenta una serie de pasos que, su vez, aglutina diferentes y completas tareas. El primero e indispensable es el que analiza nivel de impacto de los riesgos subyacentes de un desastre informático; estos últimos son la infraestructura sobre la que se deberá construir el mencionado plan. Una vez determinados, es fundamental probar y auditar las acciones, cada una de ellas adaptadas a las necesidades de la organización.
Cabe señalar que la informática empresarial conformada por dispositivos, sistemas y conjuntos de redes cada vez más complejos requiere de una atención muy especializada, ya que la propia recuperación es aún más compleja. De hecho, si hace 20 años una amenaza común era un incendio y su solución consistía en apagar el sistema central y otros equipos antes de que activaran los aspersores, ahora la interrupción de un servicio o pérdida de estos supone un gravísimo problema financiero e incluso la pérdida de confianza del cliente.
Por lo tanto, estos planes, conocidos como planes de recuperación de desastres (DRP) deben ser específicos para cada empresa, atiendo a variables tales como tipo de negocio, procesos y nivel de seguridad. En este sentido, algunas corporaciones invierten el 25 % de su presupuesto en tecnología de recuperación ante desastres.
Valora Data, son su servicio backup de sistemas, ha puesto fin a este rompecabezas que quita horas de sueño a los empresarios. Con la opción “VD Recovery” no es necesario restaurar, ya que se producen copias de seguridad actualizadas con frecuencia de dos minutos.