Parece increíble, pero en la actualidad 9 de cada 10 empresas y organizaciones no tiene un plan de continuidad de negocio. ¿Qué implica esto? Que si por cualquier motivo su actividad se viera interrumpida de pronto, tendrían que improvisar para volver a ponerse en marcha.
Y como ya sabrás, la improvisación no es buena amiga de los negocios. Suele significar pérdidas de ingresos y plazos más largos para el logro de objetivos. Por ello, es importante tener un plan de continuidad de negocio, pues este tipo de planes saben valorar los riesgos que existen y cómo darles solución lo más rápido posible, creando una hoja de ruta a medida para salir de cualquier crisis. De eso hablamos más detalladamente en nuestro artículo sobre claves de un plan de continuidad de negocio.
Ahora, no obstante, nos gustaría centrarnos en otra cosa, en esa sorprendente cifra que hemos recalcado en el título. Démosle la vuelta: solo 1 de cada 10 empresas tiene un plan de continuidad de negocio. Parece increíble hoy en día, pero es cierto.
¿Por qué las empresas no tienen un plan de continuidad de negocio?
Quizá la idea de que nuestra empresa pueda sufrir un evento catastrófico que detenga su actividad nos parece descabellada. Eso no nos va a pasar a nosotros, pensamos. Pero la realidad es que existen muchas amenazas que pueden afectar al correcto funcionamiento de una empresa. Antes era habitual pensar por ejemplo en incendios, inundaciones o robos. En la actualidad, con la importancia que tienen los equipos informáticos en el trabajo diario de los negocios, los ataques informáticos han cobrado mayor relevancia. Es el caso por ejemplo de una de las mayores aseguradoras de España, SegurCaixa Adeslas, que tardó más de un mes en recuperar la normalidad de sus operaciones por un apagón digital producido por un ataque de ransomware.
Aunque no hace falta que nos vayamos tan lejos para explicar la importancia de un plan de continuidad de negocio, pues con la llegada del Coronavirus muchas empresas han visto cómo su metodología de trabajo se quedaba obsoleta y su desempeño se resentía considerablemente ante la imposibilidad de trabajar desde sus puestos habituales.
Otro factor que probablemente influya en el hecho de que la mayoría de empresas no tengan un plan de continuidad de negocio es el precio. Muchas personas piensan que es caro y complicado tener un plan de continuidad, pero lo cierto es que con los nuevos servicios informáticos que existen resulta bastante sencillo conseguir que nuestros datos estén a salvo frente a cualquier amenaza.
Servicios gestionados de continuidad
La externalización de las infraestructuras informáticas (IT) de una empresa puede suponer una revolución en la gestión de cualquier negocio. Los servicios gestionados de continuidad de negocio no son necesariamente un servicio de recuperación ante desastres, sino que más bien sirven de prevención, evitando que sucedan problemas tales como pérdida de datos, corrupción de archivos, secuestro de información, etc.
Los servicios gestionados son una parte de un plan de continuidad, no son el plan en sí. La empresa se asegura de que los datos están seguros gracias a estos servicios, pero además debe detallar en su plan de continuidad otros aspectos como quién se va a encargar de reestablecer la conexión entre los servidores externos e internos, qué plazos son aceptables para una recuperación efectiva, etc.
Ventajas de contar con un plan de continuidad
Los beneficios de contar con un plan de continuidad son muchos. El más evidente es el económico, y es que cada segundo que la empresa está parada deja de ganar dinero, por lo que una correcta gestión de una crisis es la diferencia entre tener pérdidas o no. Pero, además, hay otros puntos positivos que nos gustaría destacar:
- La imagen de una empresa se ve reforzada al contar con un plan de continuidad, pues todos podemos sufrir en algún momento una crisis, pero cómo respondemos a ella es lo que nos diferencia. Una respuesta rápida, eficiente y organizada da credibilidad y solvencia a cualquier negocio.
- Se evitan los incumplimientos contractuales y las posibles demandas que conllevaría no poder entregar un trabajo a tiempo, perder la información de un cliente o desvelar secretos empresariales.
- Se logran oportunidades comerciales al poder responder antes que otras empresas durante una crisis.
- Se reduce el estrés laboral durante un episodio crítico, pues todo el mundo sabe qué debe hacer.
Si quieres dejar de ser una empresa más y deseas diferenciarte de la competencia por la correcta gestión que haces de una situación de crisis, ponte en contacto con nosotros y te informaremos sobre nuestros servicios gestionados de continuidad. Invierte en seguridad, invierte en tranquilidad.